Los ganadores del careo

Los ganadores del careo
Por Alberto de la Rosa Olvera

Con el escándalo que se armó por la celebración de la audiencia de desahogo de pruebas del juicio que entabló Ismael Hernández Deras en contra de José Rosas Aispuro Torres, quien sale ganando es este último porque los estrategas del PRI, le dieron todos los reflectores mediáticos.
Ese momento procesal pudo haberse realizado sin problema y sin la mayor trascendencia pero todas las estructuras del priismo acamparon a las afueras del Tribunal Superior de Justicia, semejando una especie de consejo político del tricolor y todo para intentar demostrar el músculo y lealtad a Ismael, haciendo notar que él sigue siendo su líder político y por tanto, no debe descartarse la posibilidad de su candidatura a senador por el principio de mayoría en el próximo año.
Ismael sale ganando, porque demostró que sigue ejerciendo influencia sobre la clase política, porque muchos de sus seguidores y gente cercana, se dieron cita para darle muestras de apoyo y con esto, rompe también con el estigma de los ex gobernadores, a quienes ya nadie quería saludarlos porque no representaban poder alguno; Hernández Deras, es todo lo contrario pues así se vio.
Los tricolores nunca repararon en que con toda esa alharaca, provocaron que la gente se enterara de lo que sucedía a las afueras de los juzgados y se dieran cuenta tanto de la presencia de Hernández Deras como de Aispuro Torres.
Sin duda que esto trajo como consecuencia que se hayan convocado los representantes de los medios de comunicación y hayan enfocado su atención a las declaraciones del ex priista, las cuales fueron reforzadas por la columna de Miguel Ángel Granados Chapa, misma que coincidentemente salió publicada en la víspera de la citada audiencia.
Aispuro sale ganando de este proceso judicial del orden civil, porque adquiere los reflectores mediáticos que le son tan útil para mantenerse vigente en la opinión pública y sobre todo, porque se mantiene en campaña permanente rumbo a la sucesión gubernamental del 2016 pero haciendo escala en los comicios del año entrante y del 2013.
Quien también sale ganando es el Gobernador, Jorge Herrera Caldera, ya que viene a demostrar que los pleitos y enemistades no son con él sino con su antecesor, quien tiene el efecto de polarizar el humor social.
El mandatario estatal pasó limpio, no salió raspado de las incidencias que se vivieron el día de ayer pero además, se ha preocupado por hacer acuerdos con todos los actores y partidos políticos, cuya relación se enfrió durante el sexenio pasado.
Por ejemplo, Herrera Caldera, se ha dedicado a tejer buenos ánimos con los panistas, con el Gobierno Federal a través de su coordinador de delegados, Víctor Hugo Castañeda Soto y más recientemente, con José Ramón Enríquez, Presidente Estatal de Convergencia.
Igualmente, con la llegada de Héctor Vela Valenzuela a la Secretaría General de Gobierno, representa una distensión hacia con los partidos y distintas organizaciones sociales sobre todo por su don de gentes y su trato afable.
Como vemos, ha tres ganadores y todo se desata por la cobertura a una contienda judicial que no tiene la mayor trascendencia y que es parecida a la que sostuvo Sasha Montenegro en contra de la periodista Isabel Arvide porque le había dicho encueratriz. Todo termina en un largo proceso cuyo fin es pagar cierta cantidad económica para reparar el daño moral y la ganancia sólo fue de entretenimiento para los medios de comunicación.

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Cisma Rosalesbadilleano

Hasta hace apenas el lunes, comprendí el valor de la enorme influencia y poder que representa el abogado Hugo Gerardo Rosales Badillo, pues una vez que se conoció su renuncia a la Secretaría General de Gobierno, la conmoción se encontraba por dondequiera que iba.
En todos lados se comentaba acerca de la salida de Rosales Badillo del gabinete de Jorge Herrera Caldera y todo, porque se había ungido como el hombre más influyente de la entidad por haber sido el arquitecto jurídico del grupo en el poder, al formular una gran variedad de reformas legales que estuvieron a la medida no de los reclamos sociales sino de las exigencias de la cúpula, en cuanto al ejercicio pleno del poder se refiere.
Tengamos en cuenta que este distinguido litigante, tejió una serie de reformas legales para tener el control de los organismos electorales; de la procuración de justicia; de la asignación de alcaldes ante las ausencias definitivas y la más reciente, el cambio radical en el mando de la Universidad Juárez. Todo esto sin contar la defensa de los triunfos electorales de las posiciones del Revolucionario Institucional.
Sin lugar a dudas, esta funcionalidad vino a provocar dependencia de Jorge Herrera hacia Rosales Badillo, tanto así que tuvo que echar mano de él para tenerlo en el cargo de mayor importancia en la estructura gubernamental y la percepción era para que mantuviera el orden al interior de su equipo de trabajo, gracias a su recio carácter pero la realidad, fue que su arribo a este puesto fue con el objetivo de frenar las aspiraciones que por él tenían Jorge Herrera Delgado, Jaime Fernández Saracho y Apolonio Betancourt Ruiz.
Sin embargo, todo hace parecer que Rosales Badillo, era visto por muchos como el segundo hombre más importante después del gobernador; una especie de vicegobernador y por eso su renuncia generó una enorme estela de especulaciones.
Tan sólo en las redes sociales, como Twitter, los usuarios comentaban que su salida había sido producto de las presiones de José Ramírez Gamero y para tenerlo de su lado, el mandatario estatal, había decidido cesar al abogado de sus funciones.
Otros comentaban que por fin Herrera Caldera, se estaba desprendiendo del lazo que lo une con Ismael Hernández Deras y en cambio, lleva a manejar la política interna a un ingeniero identificado con Guerrero Mier como es el caso de Héctor Vela, lo cual representaba que ahora sí, Jorge, iba a imprimir su propio sello de gobernar y que conforme pasara el tiempo, se iba a empezar a desgranar su 'mazorca' o sea, que caerían sus piezas colocadas aquí y acullá.
También se empezó a decir que fueron por razones de seguridad y muchas cosas más pero en realidad, a mi modo de ver las cosas y más porque he tratado de cerca al abogado Hugo Rosales en diferentes circunstancias, considero que le afectó su carácter; nunca quiso quitarse el uniforme de litigante forjado en un foro de choque, confrontación, controversia y vencer a los rivales en juicio con todos los elementos legales habidos y por haber. A los actores políticos y sociales con quienes se sentaba a dialogar los veía como rivales en un juzgado y no en una mesa de acuerdos políticos. En cambio, Héctor Vela, representa el otro extremo que es calmado, conciliador y sobre todo, político hasta el tuétano.
Por todo esto, la percepción es que Rosales Badillo vuelve a su estado original, o sea, a ser operador jurídico-político tras bambalinas, atendiendo las cuestiones del PRI y sobre todo en velar por el óptimo trayecto de los delfines del grupo en el poder como Esteban Villegas, Manuel Herrera y Otniel García. También estará al tanto de las reformas que se necesiten así como atender su despacho, en donde sobresale su sociedad con Gisella Rubach, al brindar consultoría jurídica a los candidatos a gobernador de diferentes entidades.
No obstante, el devenir de este sobresaliente profesional del derecho, sólo el tiempo lo dirá y conforme sea su actuar y la permanencia de su gente cercana en las principales esferas, nos confirmarán si hubo o no un rompimiento con el mandatario estatal.
hitos.mx
Hoy nos escuchamos a las 9 de la noche por Estéreo Lobo 94.1 fm

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La crisis de López Pescador

Ricardo López Pescador, sabe perfectamente que su tiempo político se encuentra en la víspera, por eso bajo el pretexto de la presentación de su informe de actividades como diputado federal, quiso mostrar su músculo de convocatoria para demostrarle al grupo en el poder, que aún debe ser tomado en cuenta para las elecciones locales del 2013, ya que su eterno sueño de ser alcalde capitalino, no se desvanece con nada.
Y es que la movilidad que tuvo este legislador en las últimas semanas, reflejó cierta desesperación al saturar a la clase política y social por todos los medios que le fueron posibles y como ejemplo tenemos los telefonazos constantes a su lista de invitados para recordarles de su ceremonia del día de ayer.
Este acto, fue muy similar a los informes legislativos que realizaba José Rosas Aispuro Torres cuando era diputado federal priista y su intención era influir entre las clases políticas y sociales del estado, como una forma de ejercer presión en la nominación de la candidatura al gobierno del estado.
Esto mismo hizo el barón de Sauces. Tanto en Durango como en Santiago Papasquiaro, reunió a la crema y nata de su partido así como de la sociedad civil pero no deja de verse la desesperación que lo corroe por un par de disyuntivas que tiene en su contra y que pueden ser fatales para su futuro político.
La primera constante desfavorable que tiene López Pescador, es sin lugar a dudas, que no forma parte de la nueva clase gobernante y más todavía, porque está bajo sospecha del actual gobernador porque le ha jugado dos travesuras. Una fue a finales del 2006 en donde el canatleco comenzó a moverse pues consideraba que Herrera Caldera, no iba a levantar como prospecto a la presidencia municipal de Durango y él mismo se vio como un posible candidato emergente.
Después en 2009, Ricardo, se lamentaba de que no traía el suficiente dinero en su campaña para diputado federal, en comparación de quien en esa contienda era su compañero candidato al cuarto distrito y finalmente, en los comicios de 2010, casi no se vio el activismo del diputado por el primer distrito, siendo afectado de sospecha al igual que el senador Ricardo Pacheco.
López forma parte del legado de Ismael Hernández Deras, pero no olvidemos que fue éste quien lo vetó de la coordinación de la bancada de los diputados federales del PRI por Durango porque empezó a presionar que él merecía este nombramiento y su protagonismo le abrió paso a Yolanda de la Torre.
El segundo factor que tiene en contra Ricardo López, al menos en su aspiración por la presidencia municipal de Durango, es que se enfrenta al impulso a las nuevas caras, las cuales forman parte del proyecto generacional ideado por la dupla Ismael-Herrera Caldera, cuyas piezas podrían orillarlo al ostracismo político.
Por ejemplo, existen tres delfines apuntados en la carrera rumbo a la alcaldía de Durango, entre los que figuran en ese orden prioritario: Esteban Villegas, Otniel García Navarro y Manuel Herrera Ruiz. Ellos sí forman parte de la clase gobernante y gozan del afecto de los mandones, detalle que aniquila los argumentos de experiencia, militancia y trayectoria.
En este sentido, Ricardo López ya sostuvo un round de sombra con las nuevas caras, específicamente con El Meño Herrera, quien estuvo a un ápice de ser el candidato a la alcaldía y cuando su paisano estaba siendo placeado, Ricardo, alzó la mano pues aducía que el ex dirigente estudiantil carecía de experiencia para pretender ocupar tan importante cargo y quizá esta revoltura que provocó hacia el interior de su partido, finalmente vino a beneficiar a Soria Ramírez, que representaba el punto de equilibrio entre la trayectoria y la juventud.
Con todo este entorno, podemos darnos cuenta del por qué del deseo obsesivo de Ricardo López en hacerse notar con poder de convocatoria; de exhibir su nicho de influencia en las estructuras tricolores y de la sociedad y todo para mandar un mensaje al grupo en el poder que no le es conveniente que lo releguen ni menosprecien, de lo contrario, podría ser elevado el costo político el dejarlo fuera de las definiciones venideras.

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