México en Sudáfrica: El porvenir de una Ilusión
POR: PSICÓLOGO CARLOS MORENO
Muchas dudas dejó ahora la manera de dirigir de nuestro Director Técnico de la Selección Mexicana, las críticas más duras fueron por la alineación que propuso y mantuvo en el juego contra Uruguay; las preguntas que todo mexicano se hacía eran ¿porqué sacó del juego a Guardado siendo el mejor jugador de la Selección Mexicana del primer tiempo? ¿Por qué alineó a Cuauhtémoc como titular si todos sabemos que el Sr. Blanco está para jugar los últimos 30 minutos del partido, cuando los rivales ya están agotados y él puede hacer algo con su toque preciso? ¿Por qué se aferró a alinear al Guille Franco si desde el primer juego se vio que no traía el olfato de gol que caracteriza a un buen delantero? ¿Por qué no metió a Barrera? El trabajo del Vasco Aguirre fue duramente criticado, el barco se le fue a la deriva desde aquella liquidación del hermano menor de Giovani Dos Santos de la Selección. La pregunta en esa ocasión era ¿porqué no sacar al Bofo y llevar a Jonathan? El fracaso de esa decisión se vio en el cuarto partido.
Pero ¿qué fue lo que realmente sucedió con la Selección Mexicana en esta Copa del Mundo Sudáfrica 2010?
Para comprender el desempeño de una Selección de futbol hay que remontarnos cómo fue que calificó para asistir. Recordemos cómo fue el camino de la Selección, un pobre desempeño con Sven-Göran Eriksson, por eso fue llamado el Vasco, Ericksson se dio cuenta de lo "politizado" que está nuestro futbol. Llegó El Vasco y nos dio una ilusión, una esperanza, clasificamos como segundo de grupo, debajo de Estados Unidos y arriba de Honduras. En los juegos de clasificación se batalló mucho con estos equipos sin mencionar a El Salvador que también hizo ver a la Selección Nacional en su real dimensión.
¿Y cuál es su real dimensión? Se habla de que la selección nacional está rankeada en el lugar 17, un lugar por debajo de la Selección de Uruguay, y ocho por debajo de la de Francia y arriba de la de Sudáfrica por setenta y un sitios.
Por lo tanto ¿qué fue lo que nos tocó ver en estos cuatro partidos? La respuesta es que la Selección Nacional está muy por debajo de las expectativas que todos tenemos. En el primer partido mostró su verdadera esencia, la Selección Nacional está para empatar partidos, nos hizo recordar la derrota amistosa frente a Inglaterra (1-3), pero en nuestra mente estaba el marcador contra Italia (2-1) a favor. Pero ya vimos el pobre desempeño de la Selección de Italia, por lo tanto, fue una victoria pírrica, esa victoria fue una ilusión.
El empate en contra del equipo representativo de Sudáfrica fue el único resultado que arrojó un punto que se logró sin cuestionamientos. Los tres puntos que logró frente a Francia cualquier equipo de segunda división lo hubiera logrado; Francia atravesaba por una gran crisis tanto dentro como fuera de la cancha, su manera de ingresar muy a la Copa Mundial fue muy cuestionada y criticada; estuvo a punto (como Argentina, y Portugal) de quedar fuera de la gran fiesta.
Los problemas de Francia: su Director técnico Domeneque (su carácter irascible) las críticas de los políticos hacia los jugadores por ser la Selección que se quedó a pernoctar en el Hotel con los costos más altos mientras en Francia se vive una crisis económica, sin mencionar la crisis natural que azotó por esos días. Los pleitos entre sus jugadores con su directiva sometieron al subcampeón, como bien lo describió Ribery: "somos el hazme reír". Una Francia que olvidó llevar la primera letra de su nombre: la letra "F".
Con esto tenemos que se le empata a la Selección anfitriona, se le gana a la Selección Francesa, y se pierde con Uruguay… ¿qué nos queda? Cuatro puntos que colocan a la Selección Nacional en segundo lugar empatado con Sudáfrica, solo que gracias a la goleada que Uruguay le propinó al anfitrión se puedo pasar a al siguiente etapa. Se llega el domingo, el pesimismo comenzaba a impregnar el discurso ontológico que permea las diatribas en torno a la Selección, los mismos jugadores están asustados. El vasco decide enfrentar a los argentinos con su arma letal escondida: el Bofo a la cancha… no sabíamos que lo de "arma letal" era para los nuestros, un clásico "harakiri" y Argentina no perdonó, no fue su culpa que el primer gol haya sido fuera de lugar, así se han ganado muchos juegos, mientras la FIFA no permita el uso de la tecnología para erradicar el error humano. Argentina no perdonó el error de Osorio (que digo error, "oso") y para que no quedara dudas vino ese gol que la estatura del Conejo no pudo ni siquiera rozar. Argentina sigue sin convencer, sin embargo partido que ha jugado partido que ha ganado. Todo depende de contra qué Alemania se enfrente, la inspirada que ha goleado o la temerosa que sucumbió contra Serbia.
Así regresa la selección Mexicana, sus triunfos contra Francia e Italia (éste último amistoso) fueron triunfos quiméricos; ya vimos que esas dos grandes potencias en este Mundial venían de simples turistas, no pasaron a la siguiente ronda. No eran nada.
Bienvenidos jugadores de la Selección Nacional, dieron su mejor esfuerzo, que el Vasco se equivocó, es cierto, pero el saber meter jugadores a la cancha no es la única función de un Director Técnico, ya cuando regrese nos explicará su táctica de juego, mientras nosotros seguiremos esperando otros cuatro años para ver si nuestra Selección pasa al tan ansiado quinto partido.
Se acabó el opio posmoderno, volvamos a nuestra realidad, a nuestros muertos, a nuestros gastos cotidianos, a nuestra paranoia primigenia de la vida cotidiana, al País en donde el que delinque impone la Ley, volvamos a ser testigos de la Guerra contra el Crimen inútilmente continuada, regresemos los ojos al País en donde la ejecución, la extorsión y el miedo es el pan de cada día, nuestro País, el País de la eterna Crisis, el País del desempleo como forma de vida, el País en donde el político es el único que sonríe a costa de los demás. Volvamos a Nuestro México Lindo y Querido.
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